sábado, 25 de octubre de 2008

Araya shiki

El tenista italiano Federico Luzzi falleció víctima de una leucemia fulminante, con tan sólo 28 años, según confirmó la prensa italiana.
Luzzi cayó enfermo el pasado domingo, con una fiebre que inicialmente hizo pensar que podía tratarse de una variedad de bronconeumonía. Pero las pruebas a las que fue sometido en el hospital San Donato de su ciudad, Arezzo, en la Toscana, revelaron que en realidad padecía una leucemia.
El tenista fue internado en la unidad de hematología pero entró en coma y falleció durante su reanimación.


Leer esa información que aparece arriba de estas letras me hizo reflexionar, pensar, conjeturar y confirmar muchas cosas.
Independientemente del contexto deportivo de esta persona, del cariño que uno le haya tomado al ver sus partidos, del dolor que en algun porcentaje tenemos los que leimos y conocimos aunque sea por tele a este muchacho...que fea forma de que los sueños se vayan de apoco y en tan poco tiempo. De pasar de estar trabajando, al hospital. En tan solo 6 dias agonizando sus sueños se terminaron yendo. Por eso confirmo que hay que vivir la vida, y darse los gustos en ella mientras ella exista.
De que nos sirve guardar lo que sentimos? esperar que? Soy partidario de que las cosas hay que decirlas, hay que hacerlas y hay que verlas. De que nos sirve irnos sin decirle un te quiero a la persona que tenés adelante... sabés si tenes luego chances de decirselo?

no se, me impacto de una forma rara.. como cada vez que veo que de la nada le descubren algo a alguien, viendo el traumatico paso de la vida totalmente normal a una complicada y luego a una sin retorno.

viernes, 17 de octubre de 2008

Carta a un amor prohibido

"Si ya se que no eres libre,
si ya se que yo no debo.
Retenerte en mi memoria
así es como yo contemplo
mi tormenta de tormento
así es como yo te quiero"
Amaral- Te Necesito


Yo sé que eres mi amor prohibido, mas no puedo alejarme de ti ya que tú me has vuelto a ofrecer el dulce sentimiento del amor que pensé que había olvidado. Me has dado todo de ti con ternura, paciencia y abnegación y lo que es más, con mucho amor. Se que esto no corresponde por el contexto en el que estamos azarosamente incluidos, pero quiero decirte que no dejo de pensar en lo vivido contigo en este pequeño tiempo compartido.
Sabemos que hoy, lo nuestro no puede ser, quizás tampoco lo hubiera sido. No obstante, la conjetura dominada por la caprichosa pasión me hace imaginar que una extensión del actual presente hubiera sido una buena idea. Pero... la prohibición cortó la cuerda. Sin embargo, ambos sabemos que hubo vacilaciones concientes de lo que cada uno quizo pero no pudo hacer.
Solo quiero que te enteres con cada una de estas letras que te quiero, como a nadie, como nunca. Porque me devolviste el fuego de la pasión y fertilizaste en mi el sentimiento ridículo de emoción al verte. Todo eso, pero por instantes, por segundos perdidos que cuestan muy caros y casi no se consiguen. Mi éxtasis, casi siempre ficticio.
No me atrevo a decirte que te amo porque no quiero amarte, no quiero llorar lo que desde el inicio estaba destinado a padecerse...pero Hecho está lo que debía hacerse.
Gracias, seguro, es la palabra que mas te quiero decir (además de las obvias) en este momento. Tu aparición significó, para mi, el viento necesario para eliminar el polvo denotador de lo antaño, reflejo de fijación de sensaciones guardadas. Me refiero al cosquilleo en el estómago, fruto de la espera del deseo y la concreción, las ganas de ver cuanto antes a alguien (vulnerando así barreras que cubrían mi momentánea ansiedad), sentirle los dedos, las manos, el brazo entre mi piel, ni hablar del cariño, la ternura, el placer y el amor.
Me has aceptado como soy y no me has pedido nada a cambio, sólo me has pedido que te quiera con ese amor que descubriste en mí que lo tenia muy escondido en el fondo de mi corazón y que ni yo sabía que lo llevaba en mí.
Ese tesoro lo descubriste tú como un cofre perdido en lo más profundo del mar y que al abrirlo encontraste el más bello diamante y ese fue mi corazón radiante y deseoso de latir por ese amor, que cuando al ser encontrado, lo puliste, lo sacaste de su coraza hasta darle forma dándole así un motivo para latir, vivir y amar.
Tú sabes que ese tesoro pertenece a un lugar triste y solitario, mas mientras puedas cuidarme y hacerme sentir que mi corazón latirá sólo por tí, permaneceré así sea a escondidas, pero recibiendo tu dulce amor y la felicidad que solo tú me sabes brindar y por el cual ahora vivo. Gracias mi amor por encontrarme.
Todo lo anterior pensaba que no lo iba a volver a experimentar en un corto plazo. Estoy seguro que hemos compartido muchas imágenes y percepciones en cada acaramelado momento, que luego dejaron impregnadas impresiones que sirvieron de recuerdos difíciles de desarraigar. Quererlos vivir ahora solo provocará tu pérdida, y tengo miedo perder algo mas que lo que se pierde comúnmente.
Aun así, también te escribo para decirte que en cada día que pasa mi corazón tiende a hacerse a si mismo un sinfín de preguntas capciosas con el propósito de no conseguir respuestas contrarias a lo que desea escuchar, con el fin de disipar un poco las dudas y engañarse por un instante. Yo, he tratado de hablar con él pero me es inútil lograr hacerlo razonar.
¿Cómo convencerlo de su soledad, de que tú no serás nuestra compañía ni quien velará nuestros sueños?
¿Cómo forzarle a abrir los ojos cuando no quiere despertar al amanecer y corre a echarse a dormir cuando anochece solo para evitar pensarte y sentirte en cada latido que de él emerge?
¿Cómo explicarle que ya estás enamorada y que llego tarde a tu encuentro?
¿Cómo crearle conciencia de la importancia que debe tener para nosotros el futuro prometedor que siempre soñamos alcanzar en el cual nunca estuviste incluida y ahora por tu causa está descuidado?
¿Cómo…?
Suelo dejar las historias sin final para no hacer bien ni mal a nadie, dejo que el universo si es que se enteró, decida; pero hoy me niego a lo inevitable. Quiero dejar esperanza, luz, fuerza de algún lado.
Como siempre es el tiempo el que traiciona y el espacio que se equivoco al acomodarnos. Contra eso ¿quién lucha?
Pero el hoy es hoy y el mañana puede ser mañana. Y con toneladas de culpa encima te escribo esta carta, estas palabras y estas letras con el deseo inconciente e incandescente de que en un futuro cercano estemos juntos y re-abramos esta caja en donde deposité lo vivido, como caja de recuerdo que luego se abre para recordar como fue algo en su momento. Confiado estoy en que esto fue un avance y anticipo de lo que en un futuro en demasía vamos a sentir, a vivir y a compartir.
Finalizando ya, una vez mas necesito que me digas ¿Cómo sano estas heridas que me destrozan el alma? ¿Cómo hago para olvidarte? Si no puedo dejar de pensar en ti ni un instante.
Yo sabía que tarde o temprano pasaría, porque el amor que siento esta prohibido. Y todo esto tenía una fecha de vencimiento encima. A la distancia de los hechos me doy cuenta al fin que siempre estuve en una nube prestada y con alas rotas para mi caida.
Siempre te tendré en mi mente y en mi corazón, aunque toda la vida sufra por este amor. Es por eso que ésto no es un Adiós, sino un Hasta luego.
Perdóname por quererte, por extrañarte, por amarte…Y por nunca olvidarte.

jueves, 2 de octubre de 2008

Jonathan Cristaldo: "De Chiquito jugaba de arquero"

Jonathan Cristaldo, delantero titular de Vélez y de la selección sub 20, con una total humildad y tranquilidad en su casa de Liniers se va acomodando para contestar las preguntas, soltándoles la mano a sus hermanitos y explicándoles que enseguida iba a volver.
Recordando sus primeros pasos iniciados en la cantera velezana dice: “Llegué a los 7 u 8 años, me trajo el padre de Walter Alcaraz. En ese tiempo era Baby. Después el técnico me llevó a cancha grande y me puso de 9”.
Desde chico siempre mostró sus cualidades como delantero. “Salí goleador 3 veces con 24 goles en cada torneo”, afirma. Si le dan a elegir una posición, elige la de 9. Para así hacer más fácilmente lo que más le gusta: Meter goles. Es por eso que dice: “A mi me gusta jugar bien de nueve. También, tirarme atrás, arrancar con pelota dominada. Pero hay partidos y partidos…”. Ídolo de Robinho y Ronaldo, (“Robinho porque es rápido y tira bicicletas y Ronaldo por la potencia, por cómo aguanta”, aclara), admite las comparaciones que se le hace con Carlos Tévez: “La verdad es que me han dicho mucha gente lo mismo. Ojala llegar a tener un poco de lo que tiene Tévez”
-¿Siempre jugaste de delantero o algunos de tus técnicos en inferiores te pusieron en otra posición?
-Cuando era chiquito atajaba. Mi papá era arquero y me metía en el arco. Un día vino un chico, me vio atajando y me dijo que un amigo tenía un club. Entonces me llevaron a probar al club ese como arquero pero le dije que jugaba en el medio. Y me pusieron en el medio.
Siguiendo con su vida en las divisiones menores de Vélez, el Churri (apodo que surgió por la insistencia del abuelo para que su nieto coma churrasco) señala: “Era muy cargoso en inferiores, me echó el técnico de las practicas varias veces. Fueron esos dos años en los que me prendía en la joda. Ahí fue que me enseñaron a respetar a los demás. Carlos Amadeo en octava y séptima me ponía al banco y me calentaba, me ponía a llorar. Pero aprendí mucho”
No es fácil la vida para un chico que recién empieza a dar, si puede, sus primeros pasos en primera. En primer lugar, el embudo hoy por hoy es más exigente y no todos pasan. Y los que pasan, cada tanto pueden mostrar porqué pasaron. De sus compañeros en inferiores, Cristaldo dice: “Están Tobio, Despósito, Bella, Velásquez. Después hay un montón de chicos que no debutaron pero están en el plantel de primera.”
-¿Cómo asimilaste el año pasado subir y bajar de categoría en tan pocos meses?
-En la época que tuve que volver a quinta fue un momento malo de mi carrera. Yo estaba en sexta, subí a primera en junio. Después se fue Russo, vino La volpe y bajamos Timpanaro, yo, Panutto y los más chicos. El 2 de Enero empezaba la pretemporada y a mi no me dijeron nada, recién el primero me enteré por la radio que no iba a hacerla mientras estaba preparando el bolso, así que un bajón anímico importante. Como la pretemporada con la quinta empezaba el 17 y bueno, me fui un par de días de vacaciones y eso me ayudo a despejarme.
-Luego de haber debutado contra Central en el clausura del 2007 alternabas partidos en los que ibas al banco y en los que no. ¿Cuándo fue que te viste seguro en que por lo menos ibas a ir al banco?
-El día que debuté contra Central (NdR: el 22 de abril de 2007, Vélez 0 vs. Rosario Central 2, con La volpe como técnico), dije que ya esta, me tenía que poner las pilas… Por ahí me decía que podía bajar de nuevo, estaba mentalizado de eso. Ya una vez baje, y no me iba a hacer nada volver a bajar. Si tenía condiciones iba a volver a subir.
-Tuviste varios técnicos que te fueron marcando cosas en tu carrera: Russo, Lavolpe, Asad y Tocalli. ¿Qué podés decir de cada uno de ellos?
-El “Turco” te enseña mucho, más que nada las vivesas del delantero que de eso sabe un montón. Russo fue el primer técnico que me llevó a primera, fui al banco, no debuté pero fue el primero que confió en mí. Después bueno, La Volpe fue quien me hizo debutar y me puso medio de 8. Y Tocalli es el que me esta dando la confianza y me mete de titular.
-Además de jugar en Vélez, sos un jugador, creo yo, indiscutido para integrar el plantel de la selección sub 20. El año que viene en el verano se va a jugar el sudamericano y luego el mundial en Egipto. ¿Pese a que falta bastante para esas fechas, estás pensando en esos torneos?
-Por ahí se que si hago bien las cosas en el club creo que una citación voy a tener para aunque sea integrar un selectivo. Estuve en el amistoso contra Paraguay en Misiones. Ahora no estuve yendo, Hugo no me dejaba ir, por estar en el plantel de primera de titular, para cuidarme. Pero si, la verdad es que tengo muchas ganas de ir porque la selección es lo más lindo.
-En esta selección hay varios jugadores de Vélez, cosa que no suele ocurrir seguido. Vos, Bella, Despósito, Tobio, Bittolo, Velásquez… ¿Se hace mas fácil integrarte a un equipo en donde hay tantos conocidos?
-Por algo es la selección, hay cada monstruo que te dejan la pelota al pie. Igual tener varios compañeros ahí habla bien del club. Ahora estamos yendo 4.
-Para terminar, ¿cómo te ves en el futuro? ¿Cuales son tus sueños?
-Y un sueño… y el de todo jugador…
-¿Jugar un mundial y salir campeón del mundo?
-(Risas) Sí, jugar un mundial. Pero para mí, creo yo que lo mas lindo es ayudar a mi familia en la parte económica, irme a jugar afuera para eso. Es un sueño, para lo único que juego, para darle todo a mi familia
-¿Y, te gustaría ir a alguna liga en especial como la de España, Italia o Inglaterra?
-Y una liga…me gusta la española y la inglesa.
-¿Un equipo?
-(Risas) ¡Y obvio, no me vas a decir uno cualquiera!... el Manchester y el Barcelona son los dos que más me gustan.
Luego de haber pronunciado la última palabra llegó la hora de la despedida, un chau, un abrazo fueron los últimos contactos. Contactos con un pibe humilde en su forma de pensar, con los pies en la tierra y con el deseo de llegar lejos para ayudar a los que desde su nacimiento lo ayudaron. Así fue que entró en su casa para estar con los suyos, con los que día a día comparte todo lo que le pasa, con los destinatarios de sus sueños, con los que son el motivo por el cual hoy juega en Vélez llevándolo a decir “para lo único que juego, para darle todo a mi familia”.


Luís